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21 noviembre 2009 1 comentario

Los jefes de la Policía Local se rebelan contra la nueva ley de Policia de Cataluña por primar a los Mossos

19 diciembre 2008 Deja un comentario

La asociación que agrupa a los jefes y mandos de las policías locales de Cataluña (ACCPOLC) rechaza el anteproyecto de Ley del Sistema de Policía de Cataluña. La presentación de la futura ley ante el Parlamento catalán es inminente, según indicó el presidente Montilla en su última comparecencia ante el legislativo autonómico. Hasta ahora Montilla no había dado prioridad al proyecto.

La Generalitat teme un contencioso administrativo por parte de mandos policiales locales, una vez se aplique la ley. La cúpula policial de la Generalitat ha estado reunida para intentar evitar un nuevo revés judicial, como el que anuló la jubilación obligatoria de médicos de la sanidad pública catalana. Tanto en el ámbito de la sanidad como en el de la policía local hay un intento del Govern de ir suprimiendo o laminando la condición de funcionario del personal afectado.

Dirigentes de la ACCPOLC calificaron el anteproyecto de extremadamente centralista, de contrario al principio constitucional de autonomía municipal y capaz de generar inseguridad. Convierte a los jefes de las policías locales en cargos de libre designación por parte del alcalde, eliminando garantías de las que hasta ahora disfrutaban, en su condición de funcionarios. Asimismo, establece la primacía absoluta de los Mossos d’ Esquadra y posibilita que mandos policiales locales sean destinados a cualquier otra función municipal, incluso no policial, con una fuerte pérdida de salario. En cambio, los Mossos siempre continuarán siendo mejor pagados que la Policía Nacional o que la Guardia Civil.

Los jefes policiales locales manifestaron que el anteproyecto es una prueba más de la “prepotencia y el sectarismo político de la dirección de los Mossos d’ Esquadra”. Añadieron que dicha dirección “está completamente dominada por políticos procedentes del PSUC (el antiguo partido comunista catalán) que tienen una visión politizada y nada profesional de la seguridad ciudadana”.

Cuando el anteproyecto de ley salió a la luz recibió una durísima crítica por parte del coronel jubilado, profesor de Historia y miembro fundador de la Unión Militar Democrática, Gabriel Cardona. En un programa de televisión, Cardona declaró textualmente en un programa de TV que el anteproyecto “lo firmaría perfectamente Beria”. Aludía a Laurenti Pavlovich Beria (1899-1953), que fue el principal organizador de los millones de asesinatos de Stalin. Curiosamente, aquella declaración no generó ninguna reacción.

Las dos asociaciones que agrupan a municipios catalanes –una próxima al PSC y otra cercana a CiU– han facilitado a El Confidencial sendos documentos de trabajo críticos con el proyecto. Pero, a la vez, resulta que muchos alcaldes están encantados de poder obtener un poder ilimitado sobre los jefes de las policías locales. Estos podrán ser cesados libremente por los alcaldes.

“El consejero de Interior Joan Saura –afirma el jefe de la policía local de una gran ciudad catalana– ha sabido vender bien a los alcaldes la idea de que ellos dispondrán a su guisa de las policías locales. Los alcaldes no se han dado cuenta de que Saura desea el control político centralizado de todas las policías locales, subordinadas a los “Mossos”, cuyo dominio comunista nadie discute”.

Los actuales rectores de la policía autonómica perderían sus cargos si Iniciativa dejase el gobierno de la Generalitat. Por ello desean poder tener otros centros de poder en los municipios, manifestaron los jefes de policías locales.

Angel Abad, el ideólogo de los Mossos

El gran ideólogo de los Mossos es, ya desde tiempos de Pujol, Ángel Abad, de 72 años, antiguo miembro destacado desde el PSUC desde el año 1962. Desde hace 46 años mantiene el mismo ideario. Hace sólo cuatro meses que Abad abandonó su condición de jubilado para integrarse a la alta dirección de los “Mossos” como asesor supremo de la organización del cuerpo.

En cuanto a dureza ideológica, experiencia política y visión a largo plazo, en la dirección de los Mossos no hay nadie que se le pueda comparar. Su supremacía de hecho es innegable. Los jefes de policías locales informantes indicaron que Abad es “la cabeza pensante”. Todos los mandos de la policía autonómica, así como el propio consejero, tienen una trayectoria política del mismo carácter, pero sin haber ocupado cargos de la relevancia política comunista que desempeñó Abad. Formó parte de comisiones internas del PSUC muy delicadas, como la denominada “de Educación y Estudio”, estuvo encarcelado bajo el franquismo y se caracterizó por una gran rigidez ideológica. Siempre estuvo interesado en cuestiones policiales.

Un destacado policía local informó que “guardando las distancias, podemos ir hacia un sistema que sea teóricamente comparable con el que se dio con Gil en Marbella, en el sentido que éste escogía a los jefes de la policía local en función de sus propios criterios, sin respetar el escalafón existente”.

El anteproyecto también otorga preeminencia a los Mossos respecto a las policías locales, modifica y recorta sus competencias, crea órganos (como una inspección de servicios centralizada) que reducen la autonomía municipal y desde luego ignora el criterio, dominante en las democracias, de policía de proximidad.

También reserva a los Mossos la necesaria colaboración con los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, califica el cargo de jefe de policía local de “lugar de trabajo designado por libre designación” (hasta ahora correspondía al de mayor graduación), que puede ser cesado libremente. Incluso suprime la obligatoriedad de que el escogido sea un oficial. En materia de personal de las policías locales la capacidad de la Generalidad seria absoluta. La Generalidad puede incluso integrar en su seno a todo el cuerpo policial de un municipio.

Asimismo atribuye lo que denomina “servicios especializados” (de hecho todos los importantes) únicamente a los Mossos, incluyendo incluso las diligencias por violencia domestica o faltas cometidas por menores. Algún artículo no puede ir más lejos, como el ocho en el que atribuye a la Generalidad “velar por el cumplimiento efectivo en todo el territorio de las responsabilidades municipales en materia de policía”.

La antítesis a las BESCAM de Madrid

Todo el proyecto contrasta con los criterios expuestos diversas veces por el ministro Pérez Rubalcaba, quien se declaró en diversas ocasiones a favor de la mancomunidad de los servicios policiales locales en el caso de pequeños pueblos. Ello se tradujo en la breve (un solo artículo) Ley Orgánica 16/2007, que los jefes de policías locales catalanas aplauden. En Cataluña corre el peligro de ser papel mojado.

El proyecto catalán también es la antítesis de la política policial de la Comunidad Autónoma de Madrid. Respecto a los municipios ésta se basa en las BESCAM, Brigadas Especiales de Seguridad de la Comunidad de Madrid. Empezó con dos mil quinientos policías locales suplementarios, repartidos en 101 municipios. Son policías locales, pero pagados por la comunidad autónoma. Entre los jefes de policía consultados no había ningún simpatizante del PP, pero todos ellos aplaudieron la iniciativa policial de Esperanza Aguirre

ABSORCIÓN DE LAS POLICIAS LOCALES

19 septiembre 2008 Deja un comentario
    

Los Mossos integrarán a la policía local de los municipios que lo pidan.

• Interior prepara una nueva ley que regulará las atribuciones de las fuerzas de seguridad catalanas.
• El texto elimina el carácter vitalicio del cargo de jefe del cuerpo municipal, que será de confianza.

BARCELONALa nueva ley del sistema de policía de Catalunya que prepara estos días la Conselleria d’Interior permitirá a los alcaldes transferir la policía municipal a los Mossos d’Esquadra.

Ésta es una de las principales novedades que recoge el último borrador del anteproyecto, al que ha tenido acceso EL PERIÓDICO y que estudian desde la semana pasada los responsables de las principales policías locales de Catalunya, mandos de los Mossos d’Esquadra y alcaldes.

La voluntad de Interior, según se desprende del borrador, es poder ofrecer a determinados ayuntamientos que transfieran íntegramente sus plantillas y medios técnicos a los Mossos. Los municipios más interesados serían los que tienen plantillas deficitarias y a los que el mantenimiento de su policía les representa una gran carga económica.

ESCUELA DE POLICÍA

La absorción de la plantilla no sería automática. Sólo podrían ser mossos los agentes que hayan pasado por la Escola de Policia de Mollet. El resto seguirían siendo funcionarios municipales.

Sin embargo, la ley no pretende hacer desaparecer las policías locales. Eso sí, en el espíritu de la reforma está el viejo anhelo de algunos dirigentes socialistas de alentar la simplificación del actual mapa policial catalán. En este sentido, el texto propicia una absorción, lenta, pero progresiva, de las plantillas locales.

La fórmula de absorción resultaría difícilmente aplicable a corto o medio plazo en casos de plantillas como los de la Guardia Urbana. Mientras tanto, a los cuerpos con más de 200 agentes –básicamente municipios del área metropolitana de Barcelona y capitales de provincia– la ley les obligaría a asumir nuevas competencias. Destacan entre ellas la tramitación de diligencias por delitos y faltas de violencia doméstica, actuar en materia de menores, incluyendo el traslado de éstos a centros de reforma, y actuar en conflictos de convivencia vecinal.

El texto también prevé que intervengan en cuestiones relacionadas con okupas, en la protección de personas amenazadas y una mayor implicación en temas relacionados con la seguridad ciudadana.

Algunas plantillas municipales ya asumen muchas de las competencias que regulará la nueva ley. Aún así, hay jefes de policías locales que desaprueban este nuevo criterio de asumir tantas responsabilidades.

Pero este apartado no es el que más preocupa a los jefes de las policías locales de Catalunya. La nueva ley elimina el carácter vitalicio que tiene el cargo del jefe de la policía local. Lo que pretende Interior es que el destino del jefe de la policía local esté ligado al del alcalde que lo designó. Así, si cesa el alcalde, cesa el jefe. Y el cargo de éste no puede durar más de cuatro años, aunque eso sí, puede renovarse. Los alcaldes son partidarios de este punto, pero la mayoría de jefes de policías locales creen que se les degrada y se les deja completamente desprotegidos.

Interior aprovechará la nueva ley para reducir las actuales categorías policiales y unificarlas con las de policías locales. En la escala básica se mantienen los rangos de agentes y cabo. Desaparece los de subinspector y sargento, que pasarían a ser oficiales. La categoría de inspector se mantiene. Y todos los intendentes serán nombrados comisarios.

El nuevo organigrama tiene sus detractores y sus defensores. Lo primero que provocará es que no se convoque el concurso para cubrir seis nuevas plazas de comisario en Mossos. Y no será así porque cuando entre en vigor la ley, tantos los 24 intendentes que hay ahora como los que salgan de la nueva promoción, serán comisarios.

Estos aspectos de la ley, que son objeto de intenso debate desde hace varias semanas en los forums de la Guardia Urbana y de Mossos, han causado malestar, especialmente entre los subinspectores a los que ahora se equiparará con un sargento. Éstos esperan que la ley contemple retribuciones económicas específicas en función de la responsabilidad que se realiza.